Mi historia: psicología con alma y propósito

Comencé mi camino como psicóloga en 2018, trabajando en distintos colegios. Durante la pandemia, fui testigo del desborde emocional de muchos estudiantes: ansiedad, crisis, incluso ideaciones suicidas.
En ese contexto, comprendí la profundidad del sufrimiento emocional y el impacto real de un acompañamiento genuino. Vi cómo mi presencia podía hacer diferencia.
Ahí todo cobró más sentido.

Paralelamente, una amiga muy especial —que ya no está en este plano— me presentó la auriculoterapia. Esa terapia despertó en mí una nueva forma de mirar el bienestar. Comencé a estudiar y aplicar terapias holísticas, sin dejar de lado la psicología que tanto amo.

Hoy integro ambos caminos. Acompaño desde lo emocional, lo corporal y lo energético, para sanar desde la raíz, con más profundidad y suavidad.

Este es mi camino. Y si resuena contigo, aquí estoy para acompañarte.

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